Pibas Jugando Al Fifa: de la agencia al freelo

Por Caro Vazquez.

Hasta hace un ratito estaba editando unos videos que pensé y grabé para una marca. Ahora estoy escribiendo esto mientras escucho reggaeton viejo, vestida así nomás, y tomo un té. Todo esto último tranquilamente podría sonar a una situación de agencia, pero estoy en mi casa, viviendo la vida freelancer de creadora de contenidos y siendo mucho más feliz.

Soy Caro Vazquez, tal vez me conozcan de notas en medios de comunicación tituladas como: “Renunció a su trabajo fijo de publicitaria para jugar al FIFA”. Y vueltas más, vueltas menos, es la realidad. La cuestión es cómo llegamos a ese titular. 

Desde que estudié creatividad en una escuela de publicidad hace varios años atrás, me enseñaron que la clave de todo este trabajo era hacer cosas distintas, ir más allá, generar un cambio, que te explote el pecho de orgullo y los demás digan “¿cómo no se me ocurrió a mi?”. Así que imaginate con el nivel de ambición que encaré mi primer laburo en agencia como Community Manager. Tanto, que a los 3 meses de entrar, además de efectivizarme, me dieron el preciado puesto de Redactora Creativa Jr. 

Ahí estuve un par y medio de años hasta que la diversión de hacer cosas que en ese momento me resultaban nuevas y geniales empezó a desaparecer; y el día a día se convirtió más en contentar a mi DC con juegos de palabras que en contentarme a mí. 

Pensé que la cuestión era que capaz ya estaba desgastada de esa agencia en particular y cambié de laburo. En la entrevista me prometieron millones de oportunidades: rodajes, spots en TV, y la posibilidad de hacer realidad todas mis ideas. No pasó, y los posteos en Facebook a los que ni siquiera les ponían pauta estuvieron muy lejos de mi experiencia soñada. 

Ya, un poco frustrada y con Peggy Olson tatuada en un brazo, decidí ponerme a buscar trabajo de nuevo, porque si no me iba a otra agencia, ¿qué iba a hacer? No tenía ningún norte y no hacía otra cosa más que trabajar, llegar a casa y jugar al FIFA en la Play.

Así llegué a mi última agencia, la que menos y más me dio a la vez. A las dos semanas de entrar renunció mi Director Creativo (gracias por avisar). Era mi primera vez trabajando con una dupla fija y de ella fue quien más aprendí en ese lugar, no solo sobre publicidad, sino también sobre la amistad y el trabajo en equipo. 

El día a día en la agencia era la vida misma, ganamos cuentas por las que no recibimos ni una palmadita en la espalda, el 90% de lo que proponíamos quedaba en la nada y por alguna razón extraña para este rubro, tenía demasiado tiempo libre. Y fue ese tiempo libre el que me salvó la vida. Porque de repente tenía mucho tiempo para pensar en mi, en ideas para mí y no para alguien que no las iba a valorar.

Así empecé varios proyectos: con mi dupla creamos un bot sobre el aborto legal (@38Responsables), y con Magui Huarte hicimos “No Hay Brief”, un podcast sobre todo lo que sentimos los creativos publicitarios. El ver que esos proyectos independientes tenían más y mejor repercusión que las cosas que hacía para la agencia me empoderó una bocha. 

Un día se me ocurrió la idea de crear un canal de YouTube sobre el juego FIFA y Fútbol Femenino, no lo dudé. Necesitaba más tiempo del que ya tenía, tenía que aprender a grabar y editar, tenía que renunciar a ese trabajo cómodo, al aguinaldo y el sueldo fijo. Pero era eso o seguir sintiéndome totalmente vacía en una profesión que se vende como todo lo contrario. 

Mientras “No Hay Brief” se convertía en mi despedida de la clásica vida publicitaria y con mucho miedo a fracasar en esta locura, renuncié otra vez. Me puse a trabajar como redactora freelance, lancé el primer video de “Pibas Jugando Al FIFA” y la rompió. 

Ahora trabajo conduciendo un programa de TV sobre videojuegos y las marcas me contactan para que yo trabaje para ellas, como Carolo Vazquez y no como una redactora escondida en el paraguas de una agencia. 

Siempre me gustó trabajar en publicidad, pero no volvería a pisar una agencia donde no valoren mi cabeza. La creatividad es una herramienta ENORME que todxs lxs que estamos en este rubro tenemos en nuestro poder. Si las agencias, los CEOs, o lxs DC te limitan en sus 4 paredes, salí de ahí. Escarbá en el baúl de lo que te mueve a vos y encontrá tu pasaje al Disney de la creatividad: el famoso y fantasioso sueño millennial de vivir de lo que te gusta.