Niñas: las queremos libres y jugando

En el Día Internacional de las Niñas, es fundamental empezar a poner la lupa en las comunicaciones y campañas apuntadas a ellas. Para acercarnos a la igualdad de género, debemos empezar a cuestionarnos cómo se las muestra, qué mensajes les transmitimos, qué lugares les damos y qué situaciones naturalizamos a su alrededor.

Queremos darle visibilidad a una campaña que toca un tema muy importante: la violencia sexual y maternidades forzadas en niñas. #NiñasNoMadres es un movimiento regional a favor de los derechos de las niñas latinoamericanas. Su objetivo es asegurar que todas las niñas puedan crecer sanas, fuertes y seguras, y puedan tomar decisiones libres e informadas sobre su salud y su futuro, lejos de violencia. Buscan informar sobre las graves consecuencias de la violencia sexual y las maternidades forzadas en la vida de las niñas latinoamericanas, así como sumar esfuerzos para exigir la protección de sus derechos.

Esta campaña nace en el 2016, cuando Planned Parenthood Global, Amnistía Internacional, GIRE y CLACAI se unen para lanzar #NiñasNoMadres.

En el 2019 impulsaron un litigio ante la ONU para que los estados cumplan su obligación de proteger la salud, la vida y derechos de las niñas. 

Según los datos de la UNFPA, América Latina y el Caribe registra la segunda tasa más alta de embarazos adolescentes del mundo. Además, se estima que casi el 18% de los nacimientos en la región corresponden a madres menores de 20 años de edad. Cada año, alrededor de un millón y medio de adolescentes de entre 15 y 19 años dan a luz. La mayoría de los embarazos en niñas son el resultado de violaciones sexuales, frecuentemente perpetradas por miembros de su familia o de otros hombres cercanos a ellas.

Destacamos la importancia de esta campaña para transmitir este mensaje de visibilización y concientización tan importante e inspirar a quienes estamos en la industria publicitaria y de la comunicación. 

¿Cómo se muestra a las niñas en la publicidad?

Los estereotipos de género están muy presentes en las publicidades infantiles. Los juguetes apuntados a niñas siguen siendo de color rosa, se las muestra con muñecos de bebés y con juguetes que simulan las tareas de cuidado y del hogar: planchas, cocinas, lavarropas, etc. Las niñeces pueden jugar con lo que deseen, pero lo cuestionable es que estos juguetes solamente estén apuntados a las niñas. 

Además de los estereotipos de género, una problemática grande en las piezas publicitarias es la sexualización de las niñas. Se las muestra en poses o vestimentas que no son las acordes a su edad para vender productos. Ésto tiene un impacto negativo en las niñas, ya que en un momento donde se está desarrollando la personalidad, el autoestima, los vínculos con las demás personas, ven el la publicidad que su rol es ser un objeto para satisfacer necesidades sexuales de los varones. Ese es el mensaje que se le transmite a las niñas, directa o indirectamente.

Uno de los peligros de sexualización de las niñas, es la naturalización de verlas en situaciones que no son acordes a sus edades. Esta naturalización se enmarca en una sociedad patriarcal, donde los varones violentan los cuerpos de las mujeres y de las niñas, y muchas veces estas situaciones terminan en casos de violencia sexual y maternidades forzadas. 

Como comunicadores tenemos que comprometernos e informarnos a la hora de pensar campañas para niñeces, porque estamos aportando a la construcción de una imagen que verán miles de personas y la cual tomarán muchas niñas como referencia para identificarse.