¿A quiénes incluye la inclusión?
Por Eliana Maité Gonzalez
En el Día Internacional de las personas trabajadoras quisimos conocer más acerca de la situación en la que se encuentra el colectivo TTNB (travesti, trans y personas no binarias).
Por ese motivo le hicimos algunas personas a Juana Molinari, activista travesti por los derechos humanos y las infancias trans, quien además trabaja en la industria de la publicidad y la comunicación.
Hablamos de la situación laboral actual, qué podemos hacer desde nuestro lugar por la inserción laboral de las personas TTNB y nos hizo reflexionar sobre la palabra “inclusión” al hablar de esta temática.
Nos gustaría que te presentes y nos cuentes de vos y de tu recorrido profesional.
Juana Molinari. Soy Arquitecta devenida en Publicitaria. Soy un activista travesti por los derechos humanos y las infancias trans. Co-fundadora de la organización El Teje que busca generar visibilidad de la población TTNB. En mi recorrido profesional pasé por distintos lugares que me llevaron a experimentar la comunicación y la publicidad desde distintas perspectivas. Desde estar adentro de las marcas, en agencias creadas por las propias marcas, desarrollo de startups y hasta en agencias “tradicionales”.
En esta Argentina actual, ¿cómo creés que se ven afectados los desafíos de las personas trans en el ámbito laboral? Como profesionales de la comunicación y publicidad, ¿cómo podemos apoyar para mejorar la situación actual y futura?
En la Argentina actual la situación laboral de las personas trans está en urgencia. Recientemente, desde el frente de Trabajadores TTNB del Estado y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) informaron que 85 personas travestis y trans que trabajaban en la administración pública fueron despedidas. Esto se da en el marco de una ola masiva de desvinculaciones que ya afectó a 15 mil trabajadores. Estos despedidos al colectivo son un claro ataque a los fundamentos de la Ley N°27.636 ”Diana Sacayán – Lohana Berkins”. Manifiesta la persecución a nuestra comunidad y significa un retroceso inadmisible al privarnos de manera ilegal del derecho constitucional a la estabilidad laboral. La situación se vuelve urgente teniendo en cuenta que hasta ahora solo se contrataron 955 de las 5550 personas que deberían haber accedido a un puesto laboral según lo establecido en la Ley.
Por lo que los desafíos siguen siendo los mismos para nuestra población: el ingreso y la permanencia en el mundo laboral. Los espacios laborales no están pensados para con nosotres. Ya desde la base que lo que buscan es INCLUSIÓN, ya determina que el espacio no nos pertenece sino que es de otras personas que sienten la responsabilidad de “incluirnos” y no formamos parte de la creación de esos espacios (en la mayoría de los casos). El derecho al trabajo incluye a todas las personas, no a algunas sí y a otras no; por lo que el acceso a ambientes seguros de trabajo los tenemos que garantizar para todas las personas, sino estamos fallando como humanidad.
Como profesionales de comunicación y publicidad creo que tenemos la responsabilidad de cambiar ese discurso de inclusión y pensar bien la representación que elegimos hacer. Estamos en el 2024 ya deberíamos dejar de perpetuar estereotipos e ir a una representación con mayor interseccionalidad con el objetivo de modificar y dejar de usar los conceptos de hegemonía e ir en búsqueda de todas las realidades para que la sociedad pueda naturalizarlas y así evolucionar hacia una nueva humanidad.
¿Cómo crees que la comunicación digital y el mundo de la publicidad pueden contribuir a la visibilidad y la lucha por los derechos laborales de las personas trans?
La única manera de contribuir a la visibilidad es representándonos sin crear estereotipos de cómo somos y deberíamos ser las personas trans. Mostrando la mayor cantidad de realidades diversas de nuestra comunidad para que la sociedad empiece a conocernos. Y hablando de la contribución en cuestiones de derechos laborales, en primer lugar visibilizar la realidad laboral de nuestra comunidad, con datos y casos reales, como los que mencioné al principio, sino esas noticias sólo quedan en medios de comunicación de nicho y nunca llegan al mainstream. Y por otro lado, ir en búsqueda de una representación que muestre que las personas TTNB podemos trabajar de cualquier cosa, al igual que el resto de la sociedad y que no se nos tiene que encasillar en determinados trabajos. Sino siempre se nos termina asociando, como por ejemplo en el caso de las travestis, a lo que se conoce como PPC: “putas, peluqueras, costureras”.
¿Qué consejos darías a las empresas para fomentar un ambiente laboral inclusivo para las personas trans? ¿Qué podemos hacer por el desarrollo y el cumplimiento de políticas de igualdad de género en ámbitos laborales?
Primero que nada, replantearse si quieren “incluir” o si quieren que el espacio también les pertenezca a las personas TTNB. Después la clave está en capacitarse, informarse y acercarse a distintas realidades de personas TTNB. Sin que todas las personas del espacio estén informadas y capacitadas no se llega a ningún lugar.
En este momento estoy trabajando junto con otras activistas para lanzar un Programa de Formación en Diversidad para empresas. Después de haber vivido distintas experiencias donde los espacios de trabajo no estaban realmente preparados para recibirnos y fracasar en la permanencia de personas trans en el espacio creo que es fundamental.
Creo que la clave para el cumplimiento de políticas de igualdad de género es que sea un tema que esté en agenda. En la agenda del país y en la agenda de cada una de las organizaciones. Creo que si un espacio de trabajo no lo tiene en su agenda no se va a lograr la equidad. Hacerlo de manera forzada y no que sea una búsqueda genuina seguramente termine en fracaso. Y además si no es genuino, después la persona trans que entra en ese espacio se termina dando cuenta enseguida y, por lo general, no termina de sentirse segura ni cómoda y no permanece en el espacio por mucho tiempo.
¿Qué retos ves en el futuro para seguir avanzando en la inclusión socio laboral de personas trans?
Estamos en un contexto donde muchos derechos garantizados están en riesgo y discusiones que creíamos saldadas están retrocediendo. Lo que me hace pensar que muchas de las estrategias para haberlo logrado funcionaron a corto plazo y no lograron tener resultados positivos a largo plazo.
Creo que vamos a tener que volver a dar discusión sobre los mismos temas pero esta vez con nuevas estrategias que logren mantenerse en el tiempo. Es un momento de mucha reflexión, análisis y aprendizajes de lo que se hizo hasta el momento para crear herramientas y estrategias nuevas que nos ayuden a seguir progresando.
¿Qué mensaje final te gustaría compartir con las personas y empresas que aún no están comprometidas, o tal vez no se han acercado a la temática de la inclusión de personas trans?
Creo que la reflexión de la palabra INCLUSIÓN me parece fundamental. Para que las personas que están “incluidas” piensen qué es lo que hace que ellas para que sí lo estén y por qué nuestro colectivo no tiene las mismas oportunidades, y cuáles creen que son las barreras que no podemos derribar para que esa realidad cambie.
Muchas gracias, Juana, por aportarnos tu valiosa mirada para que podamos construir espacios de trabajo más empáticos, seguros y libres de discriminación para las personas TTNB.
Si esta nota despertó tu inquietud y querés conocer más sobre diversidad y perspectiva de género interseccional, te invitamos a seguir explorando nuestro sitio web y redes sociales.

Eliana Maité Gonzalez
Content Manager & Copywriter.
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